Los genios mueren pobres.
Por Lorenzo Hernández • 14 Oct, 2009 • Sección: MúsicaJosé Ignacio Lapido es probablemente el mejor compositor español de rock. Durante treinta años ha dado muestras de merecer ser considerado como tal, primero liderando a los míticos 091 y en solitario tras la separación de estos. En todo este tiempo no le ha temblado el pulso para escribir en forma de canciones un gran número de obras maestras entre las que, como ocurre con los Beatles, es imposible elegir la mejor.
El reportaje ‘Felicidades rock’ del país semanal de hace dos semanas está incompleto sin el apodado ‘el poeta eléctrico’. La mayoría de los músicos que en él aparecen dirían lo mismo. Algunos como Eva Amaral no dejan pasar la oportunidad de manifestar su admiración por Lapido en las entrevistas y hacen versiones de sus canciones en los conciertos. Otros directamente las graban en sus discos. Miguel Ríos incluye una versión de ‘En el ángulo muerto’ en su último disco Solo o en compañía de otros. Quique González incluirá ‘Algo me aleja de ti’ en su disco Daiquiri Blues, de inminente aparición. Ambas canciones pertenecen al disco Cartografía, grabado, producido y editado por José Ignacio Lapido en 2008, un trabajo que ha de resignarse a llevar a cabo si quiere seguir publicando su obra.
La crítica especializada conoce perfectamente a Lapido y escriben (muy bien) sobre él en numerosas ocasiones. Quizá su ausencia se pueda justificar por su falta de repercusión comercial y su poco significado para el gran público a pesar de que su figura es un referente para muchos artistas. Así se escribe en ocasiones la historia, obviando la obra de los genios en el presente para ensalzarla en el futuro.
En una entrevista Lapido aludió a Cifran: «La música, sistema de adioses, evoca una física cuyo punto de partida no serían los átomos sino las lágrimas». Lapido, con las lágrimas que derraman sus letras, nos descubre la física del alma.
Colaboración de mi amigo y fan de Lapido: Antonio Fenoy.
Salud, compañeros!
La cita a la que hace referencia Lapido no es de Cifran, sino de Ciorán, grandísimo filósofo que tiene (tenía) mil puntos de conexión con la obra de Lapido. José Ignacio bebe claramente de su filosofía. En más de una ocasión, se ha sentido un admirador profundo de su obra y de sus palabras. Ciorán representa el pesimismo filosófico. Creo que la fuente de donde lo recogéis ya citaba mal su nombre.
Por otra lado, sí… hoy sale a la venta el nuevo disco de Quique González. En su última gira entré al camerino y le regalé mi libro, «En cada lamento que se hace canción: una interpretación de las letras de Jose Ignacio Lapido» y no os podéis imaginar la ilusión que le hizo… Y a mí, claro está. Me dijo que se lo quería comprar, que un día estaba escuchando Radio-3 y escuchó cómo Santi Alcanda me entrevistaba y que, a partir de ahí, tuvo claro que quería tener el libro. Es un pedazo de seguidor de la obra del granadino. Se nota que tiene buen gusto… jeje.
Pues, ale, amigos… es un placer que continuéis hablando de Lapido por aquí. Nos seguimos leyendo.
Salud y rock’n’roll!
Jordi Vadell
Sí, yo en un apartado de citas escribí Ciorán, más que nada porque no encontré a nadie (filósofo, poeta…) que se llamara Cifran , pero la fuente original me hacia dudar. Gracias por aclararlo.
Yo también compré tu libro, un gran trabajo.
Lapido forever.